La primera, la hipótesis del gen sexualmente antagonista, postula que los genes responsables de la atracción sexual hacia los hombres pueden tener efectos distintos en función del sexo de la persona que los posee: acarrean un coste reproductivo en el caso de los varones, pero son una ventaja para las mujeres porque conllevan un beneficio reproductivo, camiseta sevilla 2022 23 ya que las que los poseen deberían ser más fértiles. Realmente no somos conscientes del poder que tiene esa tecnología y del potencial negativo que tiene sobre el comportamiento de sus usuarios.